Durante más de dos horas, la artista estadounidense cantó unos 40 hits y rompió un récord ante la multitud. Así cerró su gira "The Celebration Tour".
La multitud que peregrinó a Río de Janeiro se fue extasiada de la playa y empapada de transpiración. A los 65 años, Madonna brindó un show de más de dos horas en el que cantó más de 40 hits, hizo vibrar al público acompañada por un cuerpo de baile y recorrió el escenario de punta a punta.
En el cierre de su exitosa gira "The Celebration Tour", se suponía que la presentación de Madonna comenzaría exactamente a las 21:45, pero empezó a las 22:47, poco más de una hora de retraso. Después arrancó y ya no paró más, y hasta se atrevió con un vestido amarillo y verde, recordando los colores de la bandera de Brasil.
La artista estadounidense cantó “Music”, uno de sus mayores éxitos, junto a Pablo Vittar, a ritmo de samba. Algunos músicos de escuelas de samba subieron al escenario para tocar y actuar.
Mientras tanto, fotografías de algunas personalidades fueron exhibidas en la pantalla gigante habilitada para transmitir el megashow. Entre ellas, Pelé, Abdias Nascimento, Marielle Franco, Sueli Carneiro, Mano Brown, Erika Hilton y Marta.
Madonna lo hizo de nuevo, y rompió un récord ante un millón y medio de personas. La reina del pop no se jubila. “Quiero decir cuánta gratitud tengo por el amor que me han dado tantos años. Quiero llorar. Ustedes siempre han estado para mí, esa bandera amarilla y verde”, expresó al público brasileño desde el escenario.
La alcaldía de Río de Janeiro informó del despliegue de miles de agentes de policía en torno a la zona del concierto para controlar a las multitudes con una estrategia similar a su plan para las famosas celebraciones de Nochevieja de la ciudad, cuando se movilizan hasta tres millones de personas.
Con temperaturas en torno a los 28 grados, los bomberos rociaron agua el sábado para refrescar a algunos fans ya congregados junto al escenario de la cantante de "Material girl". También se distribuyó agua de manera gratuita.
Los gobiernos estatal y municipal de Río dijeron que habían gastado 20 millones de reales (3,9 millones de dólares) en el concierto, mientras que el resto fue financiado por patrocinadores privados. Las autoridades estiman que el concierto podría aportar unos 300 millones de reales a la economía de Río.