El senador entrerriano volvió a quedar bajo la lupa de la Justicia tras ser demorado en Paraguay con una enorme suma de dinero que se negó a justificar.
El nuevo escándalo que rodea al senador Edgardo Kueider, detenido en Paraguay por ingresar más de 200 mil dólares sin poder declarar, recordó las causas por enriquecimiento ilícito y coimas que enfrenta desde hace meses. Ahora, se le abrió una nueva investigación preliminar por lavado de activos también, que complica aún más su situación judicial.
Hay dos expedientes previos que ponen la lupa en él. Uno de ellos en Concordia, Entre Ríos, donde se lo investiga por enriquecimiento ilícito. El otro es llevado adelante por el Juzgado Federal 1 de San Isidro, a cargo de la jueza Sandra Arroyo Salgado, debido a presuntas coimas que la compañía de seguridad Securitas habría pagado, a fin de tener arreglos de reparticiones tanto del Estado como de empresas privadas.
Actualmente al senador peronista se le sumó una nueva investigación preliminar por lavado de dinero, llevada adelante por la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (PROCELAC), de oficio. La misma inició de forma preliminar el miércoles, cuando fue detenido en Paraguay, y busca determinar de dónde surgen los más de 200 mil dólares y los 600 mil pesos argentinos que se le incautaron.
En detalle: las causas por enriquecimiento ilícito y coimas de Kueider
La causa por coimas que tiene lugar en el Juzgado de San Isidro investiga los hechos sucedidos entre 2017 y 2023, y se desprende tanto de una denuncia del periodista Christian Sanz como de las investigaciones por su patrimonio en Entre Ríos. El expediente se enfoca en sus movimientos con la empresa de seguridad privada Securitas, la cual a través del supuesto pago de sobornos obtuvo contratos en organismos privados y públicos, como Enersa, una distribuidora de energía entrerriana.
La misma firma reconoció que pagó millonarias coimas a reconocidas entidades públicas como al Registro Nacional de las Personas (Renaper), a Agua y Saneamientos Argentinos (AYSA), al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) y a la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac), entre otros. El objetivo de esto era mantener los contratos y cobrar servicios adeudados.
No obstante, según informaron desde Infobae, estos sobornos admitidos incluían también algunos trámites de tenencias de armas de sus vigiladores y para que les avisen de eventuales inspecciones. Dentro de este caso hubo varios detenidos, entre los cuales se encontrarían todos los ex directivos de la firma.
Por su parte, las denuncias del periodista Sanz, que lograron abrir otra causa previa contra el senador, apuntaban a que Kueider podría estar inmerso en una "trama de corrupción" que permitió escalar considerablemente su patrimonio y ocultarlo a partir de su rol como funcionario público.
La denuncia apunta a que el entrerriano sería el propietario de la empresa BETAIL S.A., lo cual él jamás declaró (aunque sí aseguró haber sido director de Enersa). La misma tuvo, o quizás aún tiene, al menos tres departamentos a su nombre en Paraná, Entre Ríos, y que sería dueño del 50% de su capital accionario. El dueño de la otra mitad, según la causa, es un monotributista categoría “C": Iara Guinsel Costa, secretaria de Kueider en el Senado desde el 26 de febrero de 2024, y quien también se encuentra bajo la lupa en estos momentos.
Este nombre no resonó inocentemente entre los pasillos judiciales, ya que Guinsel Costa es quien acompañaba al senador detenido cuando fue demorado en la frontera en Paraguay con la suma de dinero que se negó a justificar.