La Secretaría de Energía anunció una nueva suba para los biocombustibles que repercute directamente en el costo de producción de la nafta y el gasoil.
El Gobierno autorizó nuevos aumentos en el biodiésel y el bioetanol que tendrán un impacto directo en el costo de producción de la nafta y el gasoil, por lo que se estima que también habrá más subas en el precio de ambos combustibles.
Según la Resolución 29/2025 publicada este miércoles en el Boletín Oficial, el biodiésel, que se elabora a partir de aceite de soja, tendrá un incremento del 2% en el mes, mientras que el precio del bioetanol tuvo una actualización diferente.
La publicación indica que el biodiésel tendrá precio mínimo de adquisición fijado en $1.107.605 por tonelada, con un porcentaje obligatorio de mezcla del 5 % con gasoil. Además, el plazo de pago no podrá superar los 7 días corridos a partir de la fecha de emisión de la factura.
En el caso del bioetanol producido a partir de caña de azúcar tendrá un precio mínimo de adquisición de $717,880 por litro, mientras que el derivado de maíz se fijó en $657,962 por litro. Este biocombustible representa un 12% en la mezcla con nafta.
En este caso, e indicó que el pago por la compra de bioetanol deberá efectuarse dentro de un plazo máximo de 30 días corridos.
Desde la Secretaría de Energía sostuvieron que se detectaron desfasajes entre los valores fijados y los costos reales de producción, lo que podría generar distorsiones en los precios del combustible fósil en los surtidores. En este contexto, se consideró necesario ajustar excepcionalmente los precios del bioetanol, tanto el de caña de azúcar como el de maíz, para garantizar un equilibrio en el mercado.
El aumento de los precios de los biocombustibles impacta directamente en el costo de producción de la nafta y el gasoil, ya que estos combustibles incluyen una proporción obligatoria de biodiésel y bioetanol en su composición. Como resultado, el valor en los surtidores de las estaciones de servicio tiene a marcar una suba.
De acuerdo con la Ley 27.640, el gasoil debe incorporar un 7,5 % de biodiésel elaborado a partir de aceite de soja, mientras que la nafta requiere un 12 % de bioetanol, dividido en partes iguales (6,5 %) entre el producido a base de caña de azúcar y el derivado de maíz.