Desde esta semana, la municipalidad implementó un arancel para vehículos y guías turísticos que ingresen a la zona, por su parte, el ejecutivo provincial advirtió sobre su “inconstitucionalidad” y su impacto negativo en el sector. Mientras que el intendente Úsqueda defendió la medida y recibió el respaldo de prestadores locales.-eldiariodecatamarca.com
La nueva tasa, establecida mediante una ordenanza municipal sancionada en 2024 y que fue modificada este año, fue defendida por el intendente fiambalense, Raúl Úsqueda (UCR), que ratificó su vigencia y aseguró que fue legalmente aprobada por el Concejo Deliberante local. Sin embargo, el Ejecutivo provincial sostiene que la implementación es “inconstitucional”, ya que se habría realizado mediante decretos sin el debido procedimiento legislativo, y afecta negativamente a guías y trabajadores turísticos.
En este sentido, a través de un comunicado oficial, el Gobierno provincial señaló que “las tasas impuestas por el municipio son ilegales, ya que no fueron sancionadas conforme a la normativa vigente”. Además, aclararon que no se trata de tributos obligatorios y por lo tanto “no corresponde se les cobre y exija en los accesos a los atractivos turísticos de la zona”.
Así mismo, agregaron que la medida “atenta contra la política de promoción turística” que la provincia impulsa desde hace más de una década y remarcó que los terrenos donde se ubica el Balcón del Pissis y otras zonas turísticas “no pertenecen al municipio de Fiambalá”, por lo que no pueden ser objeto de una tasa municipal. También, cuestionaron que el municipio habría autorizado el ingreso de vehículos de tracción simple, pese a que la normativa vigente exige que los accesos de alta montaña solo sean realizados con vehículos doble tracción, debidamente preparados.
Por su parte, el jefe comunal Úsqueda, también público en redes sociales un mensaje exponiendo su defensa a la implementación de esta tasa. Aclarando que, la medida está aprobada de manera legal por el Concejo Deliberante de Fiambalá a raíz de la ordenanza N°803/34 y su modificación N°836/25.
Mencionando que, “se actuó con absoluta legalidad, apelando a la concordia, respeto y paz entre vecinos y turistas que nos visitan” indicaba. Según la medida el nuevo esquema tarifario establece un arancel de $20.000 por vehículo habilitado y $10.000 por guía turístico, además de otras condiciones específicas, quedando exentos del pago los vehículos que pertenezcan a empresas mineras.
En tanto que, la Cámara de Turismo de Fiambalá expresó públicamente su respaldo a la medida del intendente, señalando que el municipio “es autónomo y tiene facultades para legislar y proyectar políticas propias que generen recursos para su desarrollo”. Mientras que, en contraposición, la Secretaría de Turismo de Tinogasta manifestó su “preocupación” por esta decisión, señalando el impacto negativo en fechas claves como la de Semana Santa, insinuando que es una disposición “injusta y arbitraria”, porque perjudica a guías habilitados y trabajadores formales del sector.
En el marco de este nuevo escenario de debate y polémica por los cobros a los principales atractivos turísticos del interior provincial, se genera una nueva interna de tensión por la autonomía municipal en estas resoluciones.