Frente a esta amenaza del Gobierno, se abre paso una duda clave: ¿puede privatizar la empresa?

Aerolíneas Argentinas no parece tener demasiadas opciones, y aún menos con la negativa de dialogo del Gobierno con el sindicato que dirige Pablo Biró (APLA). Ayer el vocero presidencial Manuel Adorni anticipó que ya comenzaron "conversaciones con varias empresas privadas para que se hagan cargo", y este viernes Javier Milei reiteró en que hay sólo dos caminos: privatización o cierre.

El vocero explicó este jueves que la decisión de llevar la compañía al sector privado se basa "en virtud de los permanentes paros que afectaron a 40 mil pasajeros". "En una empresa privada si hacés un paro y complicas la operatoria te echan", señaló, y luego amenazó: "En la Argentina de Milei prima la ley y el orden, quienes no respeten esto van a sufrir las consecuencias".

Pero el presidente dio un indicio más este viernes al repostear una publicación de Javier Lanari, subsecretario de prensa del Estado: "Las ventas futuras de Aerolíneas cayeron 30% desde el inicio de los piquetes aeronáuticos. La empresa estaba en proceso de saneamiento. Con esto la terminaron de quebrar. Sólo quedan dos caminos: privatización o cierre".

¿Puede el Gobierno privatizar aerolíneas?

El Gobierno, en medio de la crisis de Aerolíneas Argentinas y bajo las amenazas de Biró de profundizar la situación, anunció que avanzaría en la privatización de la empresa con una foto del círculo íntimo de poder de la Casa Rosada, tras una reunión que mantuvieron en el despacho del jefe de Gabinete, Guillermo Francos.

Legalmente hoy el oficialismo no puede avanzar con la privatización, ya que esta empresa fue eliminada de la lista de privatizables dentro de la Ley Bases. Eso, sin embargo, no implica que en el futuro Milei no tenga la chance de votar una ley de privatización especial para la línea aérea. El radicalismo, la Coalición Civica, el PRO y, por supuesto, La Libertad Avanza estarían a favor de ello. 

En paralelo, distintos gremios del transporte multimodal del país que integran las centrales sectoriales como la CATT y la UGATT, acordaron en la sede de Aeronavegantes, en barrio porteño de Congreso, la creación de una "Mesa Nacional del Transporte". El objetivo es defender los derechos laborales que garantizan la no precarización de la actividad. Duro rechazo a cualquier regulación del derecho a huelga.