La Cámara Alta comenzará a aplicar el Sistema de Control de Presentismo por Datos Biométricos para los empleados de la planta permanente del Senado.
A instancias de una resolución de la vicepresidenta de la Nación y titular del Senado, Victoria Villarruel, se creó en la Cámara Alta la Comisión de Análisis de la Dotación (CAD), que tiene por objetivo controlar al personal de su dependencia.
Ese organismo comenzará a aplicar el Sistema de Control de Presentismo por Datos Biométricos para los empleados de la planta permanente del Senado, quedando exentos los contratados que dependan de los senadores y no sean alcanzados por el sistema de módulos.
No obstante, todo el personal deberá registrar su ingreso en el sistema de control de acceso mediante datos biométricos, dado que hay cuestiones "poco claras" en la estructura de la Cámara en cuanto a los “recursos humanos”.
Bajo la órbita de la Dirección General de Recursos Humanos, según especifica la resolución que lleva la firma de la secretaria administrativa, María Laura Izzo, el ingreso de personal y su categorización “requiere la acreditación de idoneidad y antecedentes que respeten la observancia de los recaudos establecidos por la Constitución; como así también el cumplimiento de los requisitos legales para su incorporación y ascenso, todo ello en una relación de razonabilidad con las misiones, funciones y objetivos de gestión de calidad de la organización”.
Una vez culminado el proceso, la CAD emitirá recomendaciones “a los efectos de optimizar la utilización de recursos humanos existentes”, lo que la propia Villarruel definió como "caza de ñoquis".
El estudio comprenderá los últimos dos años de gestión e incluirá un análisis de la designación, capacidad y ubicación laboral de las plantas permanentes, temporaria y contratados; las recategorizaciones, los agentes con destino en trámite y con requisitos jubilatorios.