La Real Academia Española sumó el término "pelotudo" a su diccionario oficial, reconociendo su uso extendido en Argentina, Chile y Uruguay. La inclusión generó repercusiones en redes sociales y se suma a una serie de argentinismos ya aceptados por la institución.

Este miércoles, la Real Academia Española (RAE) sorprendió al confirmar oficialmente la incorporación del término "pelotudo" a su Diccionario de la lengua española (DLE). El anuncio fue difundido en redes sociales por la propia institución, donde explicaron su significado y el contexto de uso, especialmente en el habla cotidiana rioplatense.

Originalmente considerado un insulto despectivo, "pelotudo" ha evolucionado con el tiempo para convertirse en un término coloquial, muchas veces utilizado con tono irónico o entre amigos. Según la definición brindada por la RAE, se usa para referirse a alguien que "tiene pocas luces o que obra como si las tuviera", y sigue siendo considerado un insulto habitual en conversaciones informales en Argentina y Chile. En Uruguay, también es común y puede hacer referencia a personas jóvenes o que actúan con poca responsabilidad.

La inclusión generó revuelo en redes, donde varios usuarios consultaron a la RAE sobre el uso de palabras similares, como “boludez”. La Academia respondió que la terminación en “-ez” es correcta por tratarse de un sustantivo derivado del adjetivo “boludo”.

Más argentinismos en el diccionario

No es la primera vez que la RAE acepta términos populares del español rioplatense. En los últimos años, ha sumado otras palabras muy usadas en Argentina, como:

Che: para llamar la atención, detener a alguien o expresar asombro.

Pibe: niño, joven o muchacho, también con uso afectivo.

Bondi: colectivo o autobús.

Laburar: trabajar.

Jijear: reír con un “ji, ji, ji”.

Cómo se incorporan nuevas palabras

Desde 2011, la RAE cuenta con la Unidad Interactiva del Diccionario, que permite a los usuarios proponer nuevos términos. Para ser incorporadas, las palabras deben estar documentadas en el uso escrito y no ser invenciones esporádicas.

Esta apertura refleja la voluntad de la institución de adaptarse a los cambios del lenguaje y reconocer expresiones que ya forman parte del habla cotidiana de millones de hispanohablantes.