La imputación a Néstor Soto por homicidio agravado incluye ahora la figura de femicidio. Se espera la declaración del acusado ante la Justicia.
El caso por el crimen de Catalina Gutiérrez, la joven influencer asesinada en Córdoba, cambió de carátula y Néstor Soto fue imputado por homicidio agravado por alevosía y por mediar violencia de género, figura que prevé la prisión perpetua. El acusado declarará ante la Justicia en los próximos días para ratificar su confesión.
La imputación a Soto fue modificada por el fiscal José Alberto Mana, quien incluyó ahora la figura de femicidio, la cual prevé la pena máxima de prisión.
Soto, quien era amigo de la víctima y compañero de facultad, es el único detenido por el homicidio de Catalina luego de quebrarse y admitir que había sido él quien la había matado el miércoles por la noche.
Tal como mostraron los videos capturados por las cámaras de seguridad, el acusado manejó el auto Renault Clio de color gris, vehículo en el cual fue encontrado el cuerpo de la joven, realizando el recorrido desde su casa y hasta la escena final del crimen, un descampado ubicado en la calle Pedro Echagüe 3900, del barrio Ampliación Kennedy.
Los investigadores sospechan que la joven se encontraba en el asiento trasero, aunque resta establecer si para ese momento estaba inconsciente o ya había sido asesinada. A su vez, según se pudo determinar tras los informes preliminares de la autopsia al cuerpo de la víctima, una vez en el descampado, Soto intentó prender fuego el auto.