Militantes, sindicatos y organizaciones sociales se movilizaron hacia el domicilio de la expresidenta en Recoleta para conmemorar el Día de la Lealtad.
El peronismo conmemora este 17 de octubre el 80° aniversario del Día de la Lealtad con una caravana que tuvo como punto de encuentro final la casa de la exmandataria Cristina Kirchner, ubicada en el barrio porteño de Recoleta. Desde temprano, columnas de militantes, sindicatos y organizaciones sociales se concentraron en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires para marchar hacia San José 1111, donde reside la expresidenta.
Los principales puntos de partida son las estaciones de tren de Retiro, Constitución y Once. Desde allí, miles de personas inician la movilización con banderas, pancartas y cánticos alusivos al peronismo y al liderazgo de Cristina Kirchner. Los organizadores definen la jornada como “una expresión de unidad y resistencia frente al avance de políticas que amenazan los derechos conquistados”.
El comunicado emitido por los sectores convocantes fue contundente: “Ochenta años después, el peronismo vuelve a convocar al conjunto del pueblo argentino frente a una realidad que repite viejos ataques: recortes laborales y jubilatorios, precarización del trabajo, vaciamiento del Estado, entrega de recursos nacionales y desprecio por la salud y la educación pública”. En ese marco, también remarcaron que la “detención ilegal de la presidenta del Partido Justicialista, Cristina Fernández de Kirchner, expresa la continuidad de esas políticas de exclusión y persecución”.
La expresidenta, por su parte, publicó un mensaje en sus redes sociales agradeciendo el apoyo y recordando el espíritu de aquel 17 de octubre de 1945, cuando miles de trabajadores se movilizaron para exigir la liberación de Juan Domingo Perón. Su publicación fue replicada por referentes del espacio kirchnerista y generó una fuerte adhesión entre los militantes presentes.
El clima en las calles combina celebración y reclamo político. Entre bombos, cánticos y banderas con la imagen de Perón y Evita, la caravana se desarrolla de manera pacífica, aunque con una fuerte carga simbólica. Para muchos de los asistentes, no solo se trata de honrar una fecha fundacional del movimiento justicialista, sino también de reafirmar el respaldo a Cristina como figura central del peronismo actual.
El Día de la Lealtad, que cada año marca un hito en la historia política argentina, vuelve a mostrar la capacidad de movilización del peronismo y la vigencia de su narrativa, incluso en un contexto atravesado por divisiones internas y desafíos electorales.