Lo anticipó en un posteo en X el secretario de Finanzas y segundo de Caputo, Pablo Quirno. Buscan así despejar el temor de que los anuncios del sábado depriman los valores de los títulos
Dos minutos antes de las 19:30 horas de este domingo, a hora y media de la final de la Copa América entre las selecciones de fútbol de Argentina y Colombia, el gobierno hizo un nuevo anuncio de política económica, evidencia de la inquietud que tiene sobre la recepción que el mercado dará este lunes a la política de “emisión cero” anunciada el sábado por el presidente Javier Milei y el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, en sendas entrevistas televisiva y radial desde EEUU, donde asistieron a un evento de empresarios y celebridades internacionales en Sun Valley, en el estado de Idaho.
A través de un posteo en la red social X (antes Twitter), el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, anunció que el Tesoro nacional comprará al Banco Central y girará los dólares para hacer frente a los intereses de los bonos Globales y Bonares que vencen en enero de 2025.
“El Ministerio de Economía procederá a comprar al BCRA las divisas requeridas para hacer frente al pago total de intereses de los bonos Globales y Bonares con vencimiento en enero de 2025. Esta operación se realizará con parte de los pesos correspondientes al superávit financiero alcanzado en el primer semestre del año, que acumulado a Mayo ascendió a $2,3 billones. Los USD 1.528 millones correspondientes serán depositados en el fiduciario, Bank of New York, quedando disponibles únicamente para ser utilizados con el fin mencionado”, dice el posteo del funcionario que en la práctica funciona hasta ahora como una suerte de viceministro de Economía.
Al anunciar que los dólares para el pago de los bonos ya estará depositado en el fiduciario, el Bank of New York, Economía busca acotar una de las eventuales reacciones negativas a los anuncios del inicio de la política de “emisión cero” que el gobierno implementará a partir de este lunes.
Sucede que una de las consecuencias de la medida de que el Banco Central, para esterilizar los pesos que emite por la compra en el Mercado Libre de Cambios, al precio oficial, de dólares del superávit comercial venderá una parte de los mismos en el mercado bursátil del “Contado con Liquidación”, a un precio cerca de un 55% superior, es que en adelante la acumulación de reservas internacionales del Banco Central, que ya en junio había sido negativa, será aún más débil. Como la seguridad sobre el pago de los bonos depende a su vez de la existencia de reservas suficientes, la lectura es que las medidas, si bien apuntan a contener el precio del dólar, corren a su vez el riesgo de deprimir el precio de los bonos y, por ende, a aumentar el nivel del riesgo-país.
Al respecto, un análisis sobre las medidas anunciadas por Milei y Caputo y emitido este domingo por la consultora Equilibra, señaló: “Supongamos que el BCRA termina comprando dólares en el MULC durante el último trimestre del año, tal como prevé el gobierno y el acuerdo con el FMI. ¿Qué nos dice la nueva medida? Que el BCRA usará esos dólares para bajar la brecha cambiaria y mantener un esquema del 2% mensual —que la mayoría de los analistas (incluyendo al FMI) considera lleva a un atraso cambiario— en vez de acumular reservas. Sería una muy mala señal para los tenedores de bonos, que saben que la posibilidad de que les paguen los servicios de deuda de enero y julio de 2025 dependerá de que el BCRA acumule reservas (hoy U$ 2.6000 millones negativas). Sugiere también una mayor tensión en la negociación con el FMI. “¿Para qué me piden fondos frescos si Uds. consideran innecesario fortalecer las reservas en el BCRA?”, podría ser una razonable objeción del organismo ante el pedido de apoyo financiero de parte del gobierno”
La oportunidad (un domingo a la tarde-noche, hora y media antes de una final que tiene en vilo a la población argentina) y la forma (un posteo en redes sociales por del segundo del ministerio de Economía, mientras su jefe y el presidente de la Nación viajan de regreso a la Argentina) delatan que el gobierno quiere prevenir una reacción negativa de los mercados en la apertura de mañana. Lejos del “cero pánico” que dijo el presidente, hay ciertamente preocupación por la situación, como ya habían trasuntado también los tiempos y las formas de los anuncios del sábado.