Tras una extensa reunión de la mesa política, se confirmaron algunos nombres antes de la oficialización de las listas; dudas por el primer candidato a diputado de la Ciudad y por las mujeres en la Provincia

El último cónclave de la mesa política de la Casa Rosada fue larguísimo. En la previa al cierre de listas nacionales, Karina Milei, Guillermo Francos, Santiago Caputo, Martín y Eduardo “Lule” Menem se encerraron el martes en el despacho del vicejefe de gabinete, Lisandro Catalán, durante más de tres horas y media -con algunas interrupciones por temas de agenda- para repasar estrategias y definir algunos candidatos para dar la pelea en las elecciones legislativas de octubre.

Las espadas políticas del Gobierno hicieron un repaso de la oferta electoral distrito por distrito. Analizaron, provincia por provincia, cómo quedaron planteadas las alianzas de La Libertad Avanza (LLA) y también cómo jugará la oposición. En el trazo grueso hubo conformidad: en el oficialismo sólo advirtieron alguna oportunidad perdida en Corrientes (por la ruptura con el gobernador Gustavo Valdés) y en Santiago del Estero (una provincia que elige senadores y donde la oposición a Gerardo Zamora quedó atomizada).

Respecto a las candidaturas, aún hay casilleros sensibles que completar antes del domingo, cuando vence el plazo para la presentación de las listas. Si bien hay varios nombres definidos, los violetas aún tienen que sumar caras visibles para la campaña, es decir, candidatos con pasta de voceros para militar la boleta en los medios y en las redes sociales, un recurso escaso en el ecosistema libertario.

El armado de las nóminas tiene que conjugar a varios factores. Además de seleccionar el perfil de los candidatos, el reparto de lugares con los socios políticos (especialmente Pro) y los casilleros para los “leales” del karinismo, a la hora de agarrar la lapicera los armadores deben contemplar pedidos puntuales que llegan desde Olivos, por requisitoria de Javier Milei.

La lista de PBA

Así, la nómina de candidatos a diputados nacionales de la provincia de Buenos Aires va a ser un rompecabezas. José Luis Espert -cabeza de la lista por decisión del Presidente- sería seguido por una influencer “pedida por Milei”. Dicen que no es famosa aunque tiene buena tracción en redes sociales. El tercer casillero está reservado para Diego Santilli, el candidato de más alto perfil de Pro. El cupo amarillo −tres lugares entre los primeros doce puestos− se completa con el diputado Alejandro Finnocchiaro (que renueva su banca) y con la diputada Florencia De Sensi, del riñón de Cristian Ritondo.

El cuarto lugar −que le corresponde a una mujer− todavía es un misterio. La novedad de las últimas horas es que el quinto lugar sería para Sebastián Pareja, el titular de LLA de la provincia de Buenos Aires y el armador karinista en territorio bonaerense. Su inclusión −que en su entorno no dan por confirmada− se lee como una jugada de Karina y, sobre todo, de los Menem para sumar a una figura de su riñón en la nómina del distrito más populoso del país y, a partir de diciembre, en la Cámara de Diputados.

Antes de la cita de octubre, Pareja, mandamás del armado bonaerense, tendrá su prueba de fuego en las elecciones provinciales del 7 de septiembre. Allí, los libertarios tienen su test más difícil porque enfrentan a los aparatos de los intendentes del PJ en unos comicios en donde se augura un muy bajo nivel de participación. En principio, se espera que en las próximas horas el titular de LLA a nivel provincial suba el perfil y retome su raid mediático.

Lo nombres de CABA

Patricia Bullrich será la primera candidata a senadora por la Capital Federal. La ministra de Seguridad se posicionará −estiman todos en el oficialismo− como la principal vocera de la campaña. No solo en la ciudad sino a nivel nacional, con mucha presencia en medios y viajes al interior del país.

Su compañero de binomio será un economista de perfil ultralibertario. Javier Milei pidió sumar a un candidato que exprese sus ideas en el Senado y le sume un perfil técnico al bloque de LLA. Se mencionan perfiles como los de los economistas Agustín Monteverde (de UCEMA) y Agustín Etchebarne, director de Libertad y Progreso y muy cercano al Presidente. También circularon −con menos chances− los nombres de Federico Furiase (director del Banco Central y uno de los asesores estrella del ministro de Economía, Luis Caputo) y los de Miguel Boggiano o Ramiro Castiñeira.

El gran debate por estas horas es quién encabezará la lista de diputados de la Capital Federal. La definición es que tiene que ser un candidato “sinónimo de los Milei”. Karina impulsa a su amiga y mano derecha, Pilar Ramírez, titular de LLA de la Ciudad y armadora de la oferta violeta porteña. Pero aún no está confirmado que la candidatura recaiga en ella. Hubo intentos −por ahora infructuosos− por posicionar a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, que, según señalan en Casa Rosada, se resiste a dejar su cartera por una campaña electoral a la Cámara baja. También se baraja el nombre de Etchebarne para esta nómina y se evalúan “voceros de la Fundación Faro”, como el cineasta Diego Recalde, que viene subiendo su perfil en canales de streaming y sets de televisión.

El think thank libertario por ahora tiene un solo candidato asegurado: se espera que Adrián Ravier, director académico de la Fundación Faro, encabece la lista de diputados nacionales por La Pampa.

En CABA, el segundo o tercer lugar (de acuerdo a quién encabece la nómina de diputados) está reservado para la diputada Sabrina Ajmechet, una legisladora del riñón de Bullrich que viene defendiendo sin matices las políticas del Gobierno. También se espera que el abogado Alejandro Fargosi, amigo de Milei y exconsejero de la Magistratura, integre la lista nacional.

Respecto a los candidatos de Pro, que recalarán en el puesto cuatro y cinco de la nómina producto del acuerdo con el macrismo, se estima que la candidatura del varón recaerá sobre Fernando de Andreis, exsecretario General de la Presidencia de Cambiemos e histórico ladero de Mauricio Macri. La candidata mujer aún está en duda: asomó el nombre de Jimena De la Torre, pero tendría el veto de la Casa Rosada −en particular, del sector de Santiago Caputo− por su perfil orientado a los temas judiciales.

Dudas y certezas en las provincias

Respecto al interior del país, hay varias definiciones con los candidatos a senadores en los distritos que este año deben renovar bancas en la Cámara alta. En Santiago del Estero encabezaría Tomás Figueroa, titular de LLA en la provincia que gobierna Gerardo Zamora. En Chaco, donde hay una alianza con el gobernador Leandro Zdero, el postulante libertario sería Alfredo “Capi” Rodríguez. Para Entre Ríos se espera un nombre conocido: se postulará Joaquín Benegas Lynch, hermano del diputado “Bertie” Benegas Lynch.

En Río Negro, la diputada libertaria Lorena Villaverde buscará dar el salto a la Cámara alta. En Neuquén, su par, Nadia Márquez, encabezaría la boleta de senadores acompañada por un “radical peluca”, Pablo Cervi. En Tierra del Fuego está confirmada la candidatura del armador libertario, Agustín Coto. Y en Salta se estima que jugará como primer candidata a senadora Emilia Orozco, diputada cercana a Las Fuerzas del Cielo. Irá como suplente el socio de los libertarios y hombre de campera amarilla, Alfredo Olmedo, quien estuvo de visita en la Casa Rosada esta semana, como parte del desfile de figuras que pasan por el despacho de Lule Menem.

Otro de los interrogantes por estas horas es qué ocurrirá en distritos importantes como Córdoba y Santa Fe. Allí, el plan A era que dos figuras el riñón de Karina Milei, Gabriel Bornoroni (jefe del bloque de LLA) y Romina Diez, respectivamente, encabezaran las boletas de candidatos a diputados, aún cuando todavía tienen mandatos vigentes por otros dos años en la Cámara baja.

Según trascendió, Javier Milei le habría bajado el pulgar a esa manipulación electoral, que tiene como único objetivo posicionar a los candidatos para la pelea por la gobernación de 2027. Se verá si los libertarios echan mano de un “plan B”. En Córdoba, por caso, aún no dan por descartada una postulación del senador aliado, Luis Juez, que cerró un acuerdo electoral con los libertarios.